¡Directo desde los 90 a tu feed! Arnold, el chico de cabeza de balón de fútbol americano, cobra vida en versión realista, luciendo su suéter verde, su gorra roja y, por supuesto, su peinado de alas doradas. Mientras se toma una relajada selfie en un aula antigua llena de pupitres de madera, Abner, su fiel cerdito, asoma curioso desde la mochila. A su lado, Helga Pataki, con su eterno ceño fruncido y moño rosa, posa entre la molestia y el amor secreto. ¡Una escena digna de editorial cinematográfica que desborda nostalgia urbana!

Prompt

Arnold de “Hey Arnold!”, versión realista, niño rubio con cabeza en forma de balón de fútbol americano, cabello dorado peinado en alas laterales y una pequeña gorra roja encajada hacia atrás en la parte superior de su cabeza. Viste su clásico suéter verde con camisa larga a cuadros saliendo por debajo y jeans azules. Está de pie dentro de una antigua sala de clases con pupitres de madera desgastada, paredes beige con carteles escolares y una pizarra verde al fondo, tomando una selfie con expresión relajada; desde su mochila abierta, colgando de un hombro, asoma Abner, su cerdito mascota, con orejas caídas y hocico rosado, mirando curioso a cámara. A su lado está Helga G. Pataki en versión realista, niña rubia con cejas marcadas y expresión entre molesta y tímida, moño rosa grande sobre su cabeza, vestido rosado con camiseta blanca debajo, brazos cruzados con una mezcla de orgullo y afecto disimulado. Luz natural fría entra desde amplios ventanales laterales, creando sombras suaves que modelan las figuras y resaltan las texturas del aula. Composición en plano medio selfie desde un ángulo ligeramente bajo, con enfoque nítido en los rostros, fondo ligeramente desenfocado. Estética editorial cinematográfica con tonos nostálgicos: crema, marrones y verdes deslavados, evocando una atmósfera íntima y melancólica de infancia urbana.